jueves, 5 de mayo de 2011

¿Quién se ha robado mis letras?: El tráfico cultural al que se enfrentan los jóvenes escritores en Puebla

Poco después de acabar su libro, Luis Emilio López Maytorena me contactó para saber mi opinión. Recibí un paquete digital con exactamente ciento cuarenta y un cuartillas. Después de digerir la obra inédita, no pude evitar pensar –Tiene veinte años-. La cuestión no era la edad, sino que entre más lo pensaba, más evidente percibía un vacío generacional en las letras poblanas. Tenía que hacer la pregunta, tenía que hacerla ¿Dónde están los escritores poblanos?

Tuve que hablar con él para que me ayudara a desentrañar el problema. Llegué a casa, preparé un café y me senté a observar la pantalla. Después de unos minutos recibí una metálica video-llamada desde Berlín Alemania, dónde López Maytorena cursa sus estudios de Filología Española y Filosofía. Terminados los acostumbrados saludos y sin pensarlo más, lancé la pregunta.
La escena de las letras
-¿Dónde están los escritores poblanos?
-Pues, yo no conozco muchos o, por lo menos, muchos que me parezca que se lo tomen con suficiente seriedad. Hay algunos naturalmente, entre los cuales me considero, pero más allá de eso valdría la pena hacer una escisión y decir “me lo imagino”. Me imagino que en los grupos más elevados, en edad también, deben de existir; Palou, Jorge Márquez Murad…Digo no es que sean lo mismo. Ahora, podemos hablar de ¿Dónde están los escritores jóvenes? Supongo que están haciéndose todavía.- Me decía López Maytorena con cierta esperanza de que la última sentencia “Haciéndose todavía” fuera cierta.
Algo parecido me respondió Beatriz Meyer directora de la escuela de escritores en Puebla, adscrita al Instituto Municipal de Arte y Cultura (IMACP). En la anterior administración, éste instituto publicó un pequeño libro “No es por presumir: Memoria de nuestro trabajo 2008-2011”. En el libro, Beatriz Meyer subraya que –Harían falta varios tomos para exponer las experiencias significativas que me nutrieron como persona-. En el mismo libro, se resalta al IMACP  como un pilar importante en la escena cultural en Puebla y considera ,al estado, como uno de las bases más importantes -con excepción del Distrito Federal- en materia de cultura. Por este motivo me pareció importante ir de una vez e intentar esclarecer qué pasaba con la escena de las letras poblanas.
–La escena no se ha acabado de construir a lo largo de muchísimo tiempo; creo que el Estridentismo es un ejemplo de esta enorme parálisis de una sociedad tan conservadora como la poblana y que ha hecho que reventaran muchas cosas, como poetas que proponen una nueva forma de decir lo que traen en la conciencia y en el alma. Se puede reconocer en Puebla la influencia de las corrientes más importantes, nacionales y mundiales, de la literatura; sus exponentes no tuvieron realmente apoyo con publicaciones importantes; se quedaron en la biblioteca, se quedaron empolvándose.- dijo Meyer con pesar.
El apoyo oficial
También señaló que, aunque no se trata de una postura “Paternalista”, sí es responsabilidad del gobierno ofrecer el apoyo necesario para multiplicar los espacios en donde estos nuevos creadores se puedan formas y, a su vez, procurar que se den a conocer e inicien su trayectoria.
Detengámonos aquí un momento, para ponderar sobre el asunto del apoyo. En mi intento de esclarecer esta cuestión, recurrí al formulario en línea del IFAI; pronto descubrí que un ciudadano promedio no podría llenar el formulario. Entonces busqué en los archivos hemerográficos en línea. Tan sólo para 2011 la cámara de diputados aprobó -tres mil 139 millones 300 mil 52 pesos para varios proyectos culturales específicos.- de los cuales, sólo el Consejo Nacional Para la Cultura y las Artes (CONACULTA) recibió 460 millones, de acuerdo con la información divulgada por el Universal. El CONACULTA tiene un gran empuje e importancia; ha ideado un sistema de becas que financian generosamente a quienes las reciben.
El programa “Jóvenes creadores” es una convocatoria que se lanza anualmente para apoyar a “Jóvenes de entre 18 y 34 años para que creen obras artísticas en el transcurso de un año. El programa otorga becas económicas, brinda tutorías con artistas reconocidos, organiza encuentros con jóvenes creadores y fomenta la interdiciplina”. Pero, si hay tanto dinero y tantos apoyos, ¿Dónde están los escritores?
Becas, concursos y editoriales: la mafia literaria
Para ninguna de las personas que consulté era un secreto. Todos ellos habían oído rumores acerca de las prácticas, que bien pudieron ser descritas en Ellery Queen, sobre el  tráfico cultural que se hace en los sistemas de becas concursos y editoriales.
En una entrevista express con Fernanda Solórzano, cuando vino a la jornada de comunicación de la Universidad Iberoamericana Puebla (UIAP), ella nos habló de lo mismo
–Ojala no me vayan a odiar. Desgraciadamente, en México, hay un sistema muy institucionalizado de becas, entonces hay muchos escritores que siguen la carrera de ser escritores para conseguir la beca del fondo, conseguir la beca del sistema y la beca de no sé que. Lo malo es que, cuando uno hace eso, es que siempre se compromete a que a lo mejor la próxima beca que pidas, en el jurado, va a estar alguien que no te conviene incomodar. Más que mafia hay una autocensura, como de no ser incomodo y a veces hay mucho amiguismo, pero eso en todos los lugares. Yo trabaje en la redacción de tres revistas, sé que puede llegar la colaboración de alguien completamente desconocido y entra; la verdad, creo que pensar en ¿Con quién debes de ser amigo para que te publiquen? No es la manera. Al final se nota como has estado de Emperador Desnudo.-
Beatriz Meyer nos pudo dar un acercamiento más especifico
-Desde el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, que es el que creó el sistema de becas, se crearon generaciones de escritores que son becarios permanentes, que son ganadores imparables de premios. Mi teoría es que, detrás del ejercicio de la palabra, hay poder y no es solamente un poder virtual o simbólico, es un poder económico; yo si creo que hay grupos que se han ido apoderando de los espacios donde hay los grandes momentos económicos: Las becas, el sistema nacional de creadores, el fondo nacional. Hay muchos premios que controla el gobierno, el clásico caso del Premio Aguascalientes de poesía, se ha comentado mucho este caso porque es obvio, evidente, que hay un grupo que lo controla y que se lo da a sus cuates- También mencionó que en los talleres se traban conjuras entre escritores reconocidos, casas editoriales y el gobierno, para colocar por lo menos a un estudiante en un premio o incluso en una editorial.
Para López Maytorena, a pesar de no estar envuelto en el ámbito de las publicaciones, nada de esto era en realidad secreto
-Hablan de ello en los concursos, que se dan estas situaciones; luego abren los sobres o, ahí hay alguien que tiene alguna intención y que nada es tan justo como se ve, como sería o como nos gustaría que fuera y finalmente es algo negativo para la literatura si es que se cree en el progreso; mucho queda inédito en ese proceso, puede ser que muchas cosas muy buenas queden inéditas-
Después de investigar un tiempo el tema, sentí una curiosidad profesional y humana –por todas las trabas a las que López Maytorena se tendría que enfrentar- por el tema de la publicación. Hablé con Gabriela Pinto Márquez, profesora (UIAP) y encargada del área de publicaciones académicas de la institución. Me comentó que la gran mayoría de las editoriales que publican en México son españolas, debido a que las grandes editoriales transnacionales compraron a las nacionales y el criterio de estas empresas para firmar contigo, es que el libro sea de un tema que venda. –Lo que nos dicen las estadísticas sobre los temas que más se publican son: La religión, el esoterismo y la superación personal. Entonces libros tipo “¿Quién se ha robado mi queso?” y asuntos así han sido bien recibidos por la gente- Además me relató que el problema de las editoriales universitarias era la distribución y el problema de las comercializadoras era que no te pagaban de inmediato –Les das un primer tiraje en consignación y, si se vende, te pagan por el tiraje vendido; si no se vende, te regresan los libros.-
La trágica conclusión
-La novela es un juego, es empezar a jugar con las posibilidades de la novela misma- ¿Cómo voy a explicarle a Luis Emilio López Maytorena que la caja de la escritura en Puebla tiene muchas combinaciones?
Eternos becados, ganadores de premios imparables. Tan sólo la beca del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes, promete una paga mensual de $8, 532.20 MXN mensuales durante un año si es que sales seleccionado en el concurso "Jóvenes Creadores".
A pesar de ello, López Maytorena y yo seguimos sin encontrar a los escritores de nuestra generación. Incluso Carlos Fuentes publicó por primera vez cuando era un adolescente. Pero en esta búsqueda por los escritores, encontré algo; una suerte de "por qué" son invisibles. 
El problema es que –Seguimos teniendo los mismo problemas, seguimos teniendo los mismos vacíos- como bien señalaba Beatriz Meyer. Las dificultades para publicar una primera novela no parecen superarse, si acaso, la brecha entre el autor y su reconocimiento se agranda con cada paso atrás que damos en reconocer que se trafica con la cultura.

2 comentarios:

  1. Muy interesante Migue, te recomiendo te acerques a Ricardo Cartas Figueroa, ahora profresor de literatura en la Prepa Zapata y fundador del movimiento literario Ultracostumbrista en la Facultad de Filosofía y Letras de la BUAP en los años 90 , si bien ya no es tan joven, tiene 33, quizá él te de otras pistas,pues él fue y es de los pocos escritores poblanos jóvenes que publicó una novela antes de los 30. Las críticas le favorecen, aunque la verdad yo no he leído nada, pero se de él y de un tal Rodrigo Arana, te paso el Link http://ultracostumnews.blogspot.com/search/label/%29%20Cartas Ana Laura

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  2. Esos, del comentario de arriba, también son mafia. Y es Rodrigo Durana, su literatura igual es cuadrada y monolítica, la vanguardia está más under, alejado de las editoriales y los premios.

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